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La finalidad de la Vida, o bien su contrario, la casualidad pertenecen a la categoría de los fenómenos que no pueden encontrar una explicación exterior documentable con argumentos probantes, es decir bien definibles. A pesar de esto, a todos nos resulta inconcebible una falta de finalidad en la Vida. naturalmente cuando se habla de "inconcebible" no nos referimos a pensamientos abstractos, afuera del contexto mismo de la Vida. Se puede pensar a una abstracción, pero del todo imposible vivirla. Las abstracciones, por el hecho que no tienenuna Forma, no logran nunca persuadir a los hombres. El caos representa, por sí mismo, algo completamente extraño a las Formas, que son siempre expresiones de individualidad. Aún así, el caos es necesario para hacer posible el desnivel potencial respecto al orden. Por eso el caos es un elemento indispensable de la Finalidad. El caso, en vez, no tiene Forma y no es un elemento de la Vida. Si pareciera serlo es por qué faltan las informaciones necesarias para comprender enteramente los fenómenos.
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