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| El Orden, como
contraposición al desorden, es un argumento que
se aborda con dificultad, sobretodo desde el
punto de vista esotérico. En contrasto con otros
fenómenos físicos de la Naturaleza, el
fenómeno Vida tiende hacia un orden creciente: a
partir del caos inicial, la Vida se presenta como
una progresiva secuencia evolutiva. A cada paso sucesivo, se
alcanzan niveles más ordenados. Observándo atentamente se podrá comprobar que al crecimiento del orden biológico corresponde un crecimiento análogo a nivel de la individualidad, hasta la consecusión de la conciencia de la propia esencia. A cada individualidad compete una identidad que se extrínseca en una Forma, que es única e irrepetible. Percibimos entonces una profunda correlación entre Orden, Vida y Forma. El caos es el opuesto de Vida por qué es, por definición, informe. Se nos propone nuevamente el profundo significado existencial de las Formas. En nuestra búsqueda interior debemos enfrentar también el tema de la manifestación como finalidad de la Vida que muda y se extrínseca en el movimiento por alcanzar superiores niveles de Formas.
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